Autor: hectorag@gmail.com

  • Piratas al acecho

    Piratas al acecho

    La niebla se extendía sobre el mar sin oleaje, envolviendo al viejo buque como una manta. La embarcación, corroída por el óxido, avanzaba lentamente en esa quietud. En su interior, las mamparas de los pasillos que conducían al puente de mando estaban descuidadas. Allí, en una esquina sumida en penumbra,…

  • Aferrado al presente

    Aferrado al presente

    En el jardín del hotel, Helena, sentada a una mesa, conversaba con un señor desconocido. Hacía muchos años que Hypnos no la veía, pero al instante no sola la reconoció sino que recordó el tiempo en que habían sido novios. Con una actitud temeraria pero discreta, se acercó a la…

  • Un sapo de otro pozo

    Un sapo de otro pozo

    Qué país tan extraño era aquel que habitaba Hypnos. Había recorrido el mundo pero no lograba asimilar la cultura local. En el «patio de comidas» se le presentaban tres opciones. Dos de ellas seguían las costumbres orientales, con platos en base a pescados y algas, sabores que Hypnos no toleraba.…

  • Hotel nudista

    Hotel nudista

    En una ciudad de España, Hypnos entró, con su esposa, al hall del Hotel donde una camarera los recibió con una gélida sonrisa. Hypnos saludó y quiso saber: -«¿Dónde se encuentra la recepción?«. La respuesta lo desconcertó: –«Esta es la sucursal 17 de la cadena Señor; la recepción está en…

  • Hypnos y Helena: un punto de no retorno

    Hypnos y Helena: un punto de no retorno

    Hypnos, con el bebé en sus brazos, miraba a Helena, quien vestida de blanco y abriendo la puerta, decía: -«me voy a una reunión«, como si fuera un mensaje de despedida. El desagrado de Hypnos, se extendió por todo su cuerpo quien respondió: -«No me parece«. Ella insistió diciendo: -«me…

  • Entre la libertad y la dependencia

    Entre la libertad y la dependencia

    El auto avanzaba con dificultad por un camino precario, que atravesaba la isla. En el interior, tres figuras compartían el viaje: el conductor, cuyos pensamientos se concentraban en el agua que los rodeaba; un hombre alto y un tercer pasajero que pasaba desapercibido. Al salir de la isla llegaron a…

  • El Domo de Cristal

    El Domo de Cristal

    En el Domo de Cristal, Hypnos, se aferraba a cada travesaño de la «escala de gato«, que apoyada sobre la pared de cristal, le devolvía su propia imagen, mientras las llagas le crecían en las palmas de sus manos. Detrás de él, las voces de las personas que lo seguían…

  • Sin dudas y sin miedo

    Sin dudas y sin miedo

    Corrió hasta el final de la planicie; sin detenerse, saltó al vacío; lo impulsaba una certeza; el cuerpo volvería a la tierra, su origen; el alma ascendería al cielo, su origen; sin dudas y sin miedo.

  • Tocó el cielo con sus manos

    Tocó el cielo con sus manos

    Pendía de un hilo, literalmente. Una cuerda deshilachada lo sostenía a él y a otros cuatro, en un vacío que se extendía hacia lo profundo. El abismo oscuro los reclamaba. Ascendía, lento, cada centímetro era una victoria contra la gravedad y la desesperanza. Una cuerda cedió, pero otra lo sostuvo.…

  • La expresidente

    La expresidente

    Se acercó al edificio con la misión de guardar los carteles que estaban en la calle y se encontró con una camioneta negra que le bloqueaba la entrada. Intentó ignorarla, pero la camioneta se deslizó hacia adelante, como si fuera un ser animado. Incapaz de entender lo que veía, decidió…